El viernes tuve la oportunidad, al darle la mano a un político...
Así es, el viernes paseaba por Lima con mi jefe, camino hacia el Tribunal Constitucional, pasamos por la puerta y justo nos encontramos con toda la comitiva, que justo llegaba, de Mufarech, no me refiero al cochino del Congreso, sino al cochino Presidente de la Region Lima. Al pasar por la puerta, y este justo bajaba. Lo reconoció a mi jefe y al pasar al lado lo saludó. Le indicó, mi asistente ...Sludgeman (si...asi dijo: Sludgeman... duh!), y le di la mano, toda una oportunidad...perdida. Pude jalarle la mano, y romperle el cuello, y hubiera sido un cochino menos en este país. Pero la realidad es que hubiera servido poco, para cada puerco que cae, hay otro que se levanta.
Lo que es yo, no me voy a lavar esa mano... la voy a cortar y cauterizar...no vaya a ser contagioso...
1 comentario:
Mira el lado bueno. Eso demuestra que no son "intocables" y que cuando querramos podemos deshacernos de toda esa clase de sabandijas...
El problema es cuando se abriran suficientes conciencias, ojos y manos para eliminar -democraticamente- a toda la clase política.
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